Fractura de escafoides: Injerto óseo vascularizado Zaidemberg (1-2 Supraretinacular Intercompartimental) con fijación con tornillos acuminados para la no unión
Visión general

Suscríbase para obtener acceso completo a esta operación y al extenso Miembro superior y mano Atlas de Cirugía.
Esta es una instrucción detallada paso a paso a través del procedimiento de un injerto vascularizado para la no unión del escafoides. El injerto utilizado en este caso se basa en la arteria 1-2 intercompartimental supraretinacular (1,2-ICSR), una rama de la arteria radial. También se suele conocer por el nombre del cirujano que lo describió en 1991, Zaidemberg (J Hand Surg Am. 1991 mayo;16(3):474-8).
El injerto, al que se accede mediante un abordaje dorsal, se utiliza con mayor frecuencia para las no uniones del polo proximal. En este caso, el escafoides y el injerto se fijaron con un tornillo Micro Acutrak TM.
En general, las no uniones del escafoides se diagnostican mejor y se evalúa su morfología mediante un TAC, aunque suelen verse claramente en una serie de radiografías del escafoides. Puede utilizarse una resonancia magnética para intentar evaluar la vascularidad del fragmento proximal en las fracturas del polo proximal; sin embargo, las resonancias magnéticas (con o sin realce de gadolinio) distan mucho de ser infalibles y la prueba de referencia para la vascularidad sigue siendo la punción hemorrágica intraoperatoria del hueso.
Cuando una no-unión está establecida (duración mínima de 6 meses), es sintomática y sin artritis asociada, suele requerir tratamiento para el que hay varias opciones disponibles. El tratamiento no quirúrgico con férula y analgesia o procedimientos menos invasivos como la denervación de la muñeca suelen utilizarse en los casos en que los pacientes son mayores o no desean una cirugía mayor. Sin embargo, como la historia natural de la no unión del escafoides es desarrollar artritis a lo largo de 5-10 años, el tratamiento quirúrgico para unir el escafoides está indicado en la mayoría de los casos.
La naturaleza exacta de la posible cirugía variará a menudo en función del grado de colapso del escafoides, la esclerosis o la formación de quistes alrededor de la no unión, la localización de la no unión dentro del escafoides y las preferencias del cirujano.
Las opciones incluyen la fijación con tornillo compresivo, alambre de kirschner, grapa o placa con o sin injerto. Injerto abierto o artroscópico que puede ser vascularizado o no vascularizado, esponjoso o corticoesponjoso, siendo las zonas donantes más habituales el radio distal y la cresta ilíaca.
Tras un injerto de escafoides y la fijación con tornillos, los pacientes suelen llevar una escayola durante 6-8 semanas con fisioterapia de los dedos y el pulgar, seguida de la retirada de la escayola y la fisioterapia de la muñeca una vez confirmada la unión radiológica y clínicamente.
Las complicaciones de este procedimiento incluyen la no unión, problemas con el metal, infección, lesiones iatrogénicas del cartílago y lesiones tendinosas y nerviosas.
Los lectores de OrthOracle también encontrarán de interés las siguientes técnicas de instrucción asociadas:
Fractura de escafoides: Injerto vascularizado basado en la arteria volar del carpo para la no unión
Autor: Mr Mark Brewster FRCS (Tr & Orth)
Institución: The Queen Elizabeth Hospital, Birmingham, UK.
Los clínicos deben solicitar aclaraciones sobre si cualquier implante demostrado está autorizado para su uso en su propio país.
En EE.UU.: fda.gov
En el Reino Unido: gov.uk
En la UE: ema.europa.eu